Recuerdos en la nieve (V): tabaco y voluntarios.
Una voz joven destensó la situación. Era Fernandito Bigotes, natural de Salamanca, decía tener 20 años, pero todos sabían que era mentira, que aún no había cumplido siquiera los 18.
Una voz joven destensó la situación. Era Fernandito Bigotes, natural de Salamanca, decía tener 20 años, pero todos sabían que era mentira, que aún no había cumplido siquiera los 18.
La comida sería mediocre, pero el apetito de los guripas insaciable, venían de ¨La España del hambre¨. «¡Aprovechaos! Sabe Dios lo que tendréis a la vuelta»