Para los que conozcáis la editorial «Cascaborra Ediciones», ya os será familiar su saga «Historia de España en viñetas»; para los que no la conozcáis, poned atención a la siguiente entrevista. La intención de Juan Olivares, su fundador, no es otra que divulgar la historia de España a través de un formato muy maltratado por la opinión general: el cómic.
Julián es un tipo con agallas, quiere distinguirse de los demás, hay tierra más allá de Mortadelo y Filemón -con todos los respetos para Ibáñez-. Para ello ha sabido rodearse de los mejores guionistas y dibujantes, tipos de una calidad sobresaliente, como lo son Javier Yuste (guionista) y Antonio Gil (dibujante), quienes han sabido acercar un pedazo de nuestra historia a todos los públicos.
Javier y Antonio han colaborado por primera juntos vez en «1921: El Rif», un homenaje al Regimiento de Caballería Alcántara, el legendario regimiento de caballería que con sucesivas cargas suicidas se sacrificó y logró salvar miles de vidas en el desastre de Annual.
Aquí vamos en plan Tarantino
Antonio Gil, dibujante
P: ¿Os aguantáis?
Javier: Sí, nos llevamos de puta madre.
Antonio: Tendríamos que trabajar más juntos…
Javier: Sí, lo que pasa es que al «Antoñito» le paso relatos y ni los lee. Yo, que le doy lo mejor de mis neuronas.
Antonio: Joder… los tengo guardados en carpetas, tengo ordenador nuevo y está todo en discos duros aparte.
P: Oye, ¿desde cuándo os conocéis?
Javier: Pues fue el Julián, haciendo de Celestina, quien nos unió en matrimonio de contrato de cesión de derechos de autor. Entre Julián y yo elegimos entre diferentes dibujantes y nos convenció el trabajo de Antonio. Luego me pasó su contacto y fue «flechazo» al instante. Nos caímos bien desde la primera charla. Fue en 2018.
Antonio: Una eternidad.
P: Toda una historia de amor…
Javier: Pero casto.
Antonio: Casto y puro.
Antonio es más conocido que el Lute
Javier Yuste, guionista
P: ¿Lo tuvisteis fácil para trabajar juntos?
Antonio: Por mi parte sí. Es como yo, ve las viñetas como en una peli.
Javier: Fue muy fácil trabajar con Antonio. Ofrecía una visión cinematográfica y no era un melindroso con el guión, violento y políticamente incorrecto. Encajaba todo, como piezas de un puzle. Hablábamos casi todos los días y compartíamos información constantemente, algo que no siempre sucede en una relación guionista-ilustrador.
Antonio: Yo nunca puse una sola pega al guión, ni en su estructura ni en su metraje o esquema de viñetas.
Javier: Concho, es que los hay que no quieren ni hacer una página de prueba para ver si el estilo concuerda con el proyecto. Con Antonio fue todo llano, como una autopista en Castilla.
P: Está la cosa jodida por el mundillo del cómic…
Javier: No es fácil encontrar apoyo. Por un lado, en España el cómic es un arte menospreciado, lo cual es una memez. Me ha pasado personalmente. Antes publiqué algunos libros, novelas, etc., y cuando dices que has publicado un cómic, te miran raro y, aquellos que no se perdían una, ya no te compran el «hijo raro».
P: ¿Es vuestra primera incursión por este mundillo o ya estáis más curtidos que el Tercio de Nápoles?
Antonio: En mi caso, curtido en la ilustración histórica. Un chorro de publicaciones en distintas editoriales.
Javier: «1921» es mi primer cómic publicado, pero no el primer guión. Ese primero ha visto la luz este mes («1898: Cuba»). De adolescente y durante la carrera hacía chorraditas con los lápices y me hubiera gustado mucho ser dibujante. Cuando dejé de tener una mesa donde dibujar cómodamente, me entregué a la literatura y, hoy día, lamento no ser también dibujante, podría sacar adelante algún proyecto personal. El Antonio… Es más conocido que el Lute.
Antonio: El guionista siempre está más en la sombra, y es una pena. Puedes hacer el mejor dibujo del mundo, pero sin una historia bien construida es papel mojado.
La correctora nos comentó que corrigiendo el cómic había pasado calor y sed.
Antonio Gil, dibujante
P: ¿De quién se inspira cada uno? ¿Cuáles han sido vuestro maestros o espejos en los que reflejaros?
Javier: Como escritor siempre he querido emular a John le Carré, pero al de los años 1970. Su tochazo «El honorable colegial» es toda una master class de literatura.
Antonio: Javier ya sabe a quien he admirado siempre… Sam Peckimpah, Ridley Scott… los grandes directores de cine. Veo el cómic desde una perspectiva cinematográfica. Para mí son escenas, un story board, una luz y enfoque correcto… Mucho dramatismo en la escena… Y eso, por suerte, me ha valido unas críticas muy buenas en USA.
Javier: «1921» tiene mucho de Peckimpah.
Antonio: Sí, Grupo Salvaje, fue mi guía, mi inspiración… Quise recrear Annual como una especie de Western crepuscular… Aquí vamos en plan Tarantino. En Stalingrado fue lo mismo, el cómic empezaba con luces y color y terminó siendo blanco y gris, deprimente, sangre, fuego y nieve… Los personajes se van degradando, tanto mental como físicamente. En 1921, un tanto de lo mismo, pero más «controlado». La correctora nos comentó que corrigiendo había pasado calor y sed.
Javier: SÍ, fue brutal que lo dijera.
P: Sabéis transmitir cabrones, a mí me pusisteis los pelos de punta en más de una ocasión.
Julián Olivares es un caballero editor, cumple con su palabra y, cosa rara, paga.
Javier Yuste, guionista
P: ¿Cómo veis el tema de la historia y las nuevas generaciones?
Antonio: Fatal. Ninguno. Interés cero. En general, y salvo excepciones. Y es una pena. Saber de Historia serviría para no repetir otra vez lo mismo, no caer en la misma trampa, pero nada.
Javier: Llevamos años en caída y nada se ha hecho para corregirla. Para empezar, está la educación, yo salí del colegio sin saber ni jota. No me enseñaron nada. No es que se metieran contigo los compañeros porque te gustara ver enciclopedias y eso; es que estaba mal visto hasta por los profesores, quizá porque les suponía un trabajo extra. Los chavales, ahora, hacen más caso a un tuit que a la verdad que puedes encontrar por ti mismo. Joder, ¿cómo te iban a ayudar a presentarte a un concurso de literatura con 15 años?
P: ¿Y en todo esto no tienen también culpa nuestras instituciones’
Javier: Es que a las instituciones parece que les da dentera todo esto, como si tuviera que institucionalizarse una vergüenza nacional por haber creado la globalización, por haber sido una potencia de ultramar hasta 1898
P: ¿Se podría hacer más por mantenerla viva? Antonio, tu con tus dibujos lo haces muy bien.
Antonio: Claro que se podría hacer, pero… Hay una idea en curso y presentada, pero no creo que salga… Precisamente porque depende del Gobierno, en este caso de Andalucía. Con la historia tan rica que tenemos en España… y en este caso en Andalucía… se podría hacer una maravilla. Nadie sabe quien inventó las gafas, y… ¡Mira! Fue en Andalucía. Nadie sabe dónde empezó el conflicto entre sunís y chíies, ¡Mira! Fue en Andalucía. ¿El primer hombre en volar (que se estrelló contra el suelo)? En Córdoba. Hay mucho para hacer un buen cómic histórico, pero…
Quise recrear Annual como una especie de Western crepuscular
Antonio Gil, dinujante
P: La Guerra del Rif es por desgracia una gran olvidada a pesar de la escasa distancia temporal que nos separa de ella. Todos hemos tenido algún familiar «allá por tierra africana», como cantaban ¨Las corsarias», ¿es vuestro caso?
Javier: Mis conocimientos familiares no llegan tan lejos. Son un tanto difusos antes de la guerra civil 36-39.
Antonio: Este cómic lo hice por un tema personal. Mi abuelo luchó allí como Capitán de Artillería. Aunque ya desde antes estaba fascinado por el tema de la guerra de Marruecos, de la mano del tristemente fallecido Rafael Martínez Simancas, amigo personal.
Javier: Yo, si te digo la verdad, hasta que no me dio Julián el encargo, apenas sabía nada de la guerra de Marruecos. Fue a raíz de documentarme cuando aprendí y supe de todo este drama. Reconozco que hasta me leí un libro de veterinaria militar para lo de los caballos -libro de la época, para no tropezar-. Igualmente uno de maniobras de caballería.
P: El que haya tenido la oportunidad de leer el cómic se habrá percatado de que Carrillo se mete una moneda en la boca. ¿Tiene alguna explicación?
Javier: Eso es un recurso para salivar más y tengas menos sensación de sed, truquito de Fuerzas Especiales.
P: ¿Y de los orines azucarados qué me decís? ¿No habéis pensado en prepararlos alguna vez?
Javier: No, no entra entre mis combinados favoritos.
Antonio: Pero era usual. No había agua por ningún lado, y los blocaos estaban muy mal posicionados con respecto a los ríos.
P: Expósito, ¿en qué se inspiró cada uno para crear al personaje?
Antonio: Hum… Me vino a la cabeza Christian Bale, Edward Norton… Actores de ese tipo
Javier: En nadie en concreto, los personajes vienen a ti, se autoinvitan. Al principio era solo un soldado corriendo por el desierto, no lo tenía muy claro qué le iba a suceder.
P: ¿Se ha saldado la deuda conveniente con el regimiento de Alcántara?
Antonio: Yo creo que sí, que se ha saldado por Cascaborra. Otra cosa es que se aprecie por otras partes, que no lo sabemos.
P: Cascaborra parece que ha llegado para quedarse. ¿Contará de nuevo con vosotros? ¿Os habéis planteado volver a trabajar juntos?
Antonio: Por Cascaborra no sé, en otros proyectos quiero y quizás sí. No es por Cascaborra, ojo, es por tiempo.
Javier: A mí me tiene «atrapado» con la adaptación de la saga Cienfuegos de Alberto Vázquez Figueroa. Si Julián quiere, no tengo inconveniente en seguir trabajando para él. Es un caballero editor, cumple con su palabra y, cosa rara, paga. De todo lo que he publicado a través de editorial es el único que no me ha racaneado u «olvidado» de pagar lo acordado
Antonio: ¡Nunca! Como él, pocos. Y de los que conozco, que son grandes, muy grandes… mejor me callo.
P: Eso es algo digno de mención y creo que a la hora de comprar un ejemplar el lector debe saber.
Cuando dices que has publicado un cómic, te miran raro.
Javier Yuste, guionista
P: Ha sido todo un placer charlar con vosotros. Gracias por vuestro tiempo y por daros a conocer a los lectores de Libros y Lanzas, que seguro que toman nota de vuestro cómic para la carta a los Reyes.
Javier: Reyes, San Valentín… lo que sea
Antonio: Verás como sí
P: Un abrazo amigos, felices fiestas
NO OLVIDES PONERLO EN TU CARTA A LOS REYES
